"Amor en el dolor"
CON JANAIMAR
EP. 021
En todas las parejas hay desafíos, pero lo importante es que ambos estén dispuestos a luchar juntos para superarlos. En este episodio te contaremos un testimonio de superación en el que u grandes dificultades y logró fortalecer su relación. Aunque cada pareja es diferente, este relato puede inspirarte a crecer y mejorar en tu propia relación.
El Testimonio
Desde el principio, tuvimos que enfrentar problemas legales y migratorios que pusieron en peligro nuestro matrimonio y su estabilidad emocional. Perdimos todo lo que teníamos y tuvimos que resolver problemas en tan solo una semana de casados que muchas parejas no han abordado en años. A pesar de ello, decidimos no rendirnos y luchar juntos para superar todas las adversidades.
El mayor miedo que enfrentamos fue la posibilidad de perderse el uno al otro. La incertidumbre de no volver a verse generaba un temor abrumador. Sin embargo, aprendimos que no podíamos controlar las situaciones de dolor que se presentaban en nuestras vidas, pero sí podíamos elegir cómo enfrentarlas y luchar juntos contra ellas.
La Importancia de Luchar Juntos
Mantener una relación no es sencillo, es una misión. Ambos miembros de la pareja fueron llamados por Dios a cumplir una misión más grande que solo estar juntos. Fueron enviados para llevar el mensaje de Dios y establecer su reino. Debemos superar la cuestión de gusto personal para convertirnos en un propósito divino. Con esta visión clara, podremos mejorar nuestro matrimonio, paternidad y todo aspecto de nuestras vidas.
El compromiso es clave en el proceso de superación. Ambos debemos comprometernos a estar juntos en las buenas y en las malas, sin confundir el compromiso con la conveniencia. No buscar solo la felicidad personal o recibir ciertas cosas del otro, sino que estar dispuestos a estar allí, incluso en momentos de tristeza o discusiones. El enfoque de centrarse en lo correcto, evitando que las distracciones distorsionen nuestra visión de la relación.
Si estás dispuesto a crecer y fortalecer tu relación, recuerda que no estás solo. Busca el apoyo de un líder espiritual o consejero que pueda brindarte dirección específica. ¡Juntos pueden lograrlo!